EL SEVILLA SE ENCONTRÓ CON UN MURO

El partido que han disputado el Sevilla F.C. y el R.C.D. Español ha tenido varias facetas bien diferenciadas.

La primera y esa emotiva fue los dos aplausos, uno en el 16 en homenaje a Antonio Puerta y el segundo en el minuto 21 con una gran ovación a Dani Jarque. El público sevillista es, en este tipo de cosas, muy exclusivo. Lleva aún a flor de piel la pérdida de nuestro querido Puerta y se solidariza perfectamente con la no menos desgraciada desaparición de otro gran deportista como fue Dani Jarque.

Y ya, metiéndonos de lleno en el partido, el primer tiempo fue netamente del Sevilla F.C. aunque el R.C.D. Español vino con la lección del contragolpe perfectamente estudiada, a sabiendas de que el equipo nervionense es un grande del fútbol y su juego daría muchos dolores de cabeza a Kameni y a su defensa.

Zokora viene demostrando partido por partido que es un baluarte muy importante en el esquema ofensivo sevillista. Sus pases en profundidad, sus constantes galopadas siempre con un alto contenido técnico y peligroso y su buen saber estar en cada momento ha sido, junto a Perotti los dos jugadores que han brillado esta noche en el estadio Sánchez Pizjuán.

Navas es para echarle de comer aparte. Tuvo todo el tiempo a su lateral izquierdo D. García loco y sin saber por donde se le escapaba la liebre de Los Palacios.

Pudo saltar el júbilo en el minuto 24 de este primer tiempo con la falta magistralmente sacada por Perotti. Pero hoy Kameni tenía su día. De no haber sido por él, el equipo españolista hubiese cargado con varios goles en su casillero. Hubo dos clarísimas ocasiones, pero la de Renato a pase de Navas y a dos metros de la portería, falló escandalosamente algo que nunca falla. Podría haber significado el 1-0.

Ocasiones fallidas por ambos equipos, el local, en jugadas trenzadas y con disparos desde fuera y dentro del área que cuando no iban desviados, Kameni se encargaba de blocar. Y por el equipo visitante, recuperación de balón y tiro largo de Nakamura a la zona de Callejón para que éste rematara en tiro cruzado o centrara a la banda contraria para que fuera Luis García el que se encargara de tirar a puerta.

La segunda parte comenzó algo más pausada aunque no exenta de buen juego y del mismo talante. El Sevilla F.C. presionando y el R.C.D. Español aguantando y esperando su ocasión de contragolpe.

La sustitución de Dutscher por Capel pudo ser la clave del partido. M. Jiménez prescindió del taponador del centro del campo para dar aire fresco a la banda derecha y colocar a Perotti junto a Negredo.

El primer balón que tocó Capel le costó al equipo españolista la tarjeta roja. Tuvo Pochettino que remendar la defensa a costa de un centrocampista. La defensa formada por los argentinos Roncaglia y Forlin fue determinante para la consecución del empate.

Ya, a partir del minuto 25, los nervios hicieron acto de presencia en el equipo sevillista que veía cómo el partido se le ponía cuesta arriba y la ocasión de ponerse a un solo punto del R. Madrid se le esfumaba por momentos.

Otra ocasión desaprovechada por Capel en el minuto 69 solo ante Kameni que, si en vez de mirar al balón hubiera mirado al portero, podría haber sacado un suave toque hacia el palo.

Poco pudo hacer el oportunista Chevantón, goleador en este tipo de partidos, pero que se contagió rápidamente del resto de sus compañeros.

Buen partido el que hemos disfrutado esta noche pero con mala suerte para el Sevilla F.C. de haber tenido en la portería contraria a un inspiradísimo Kameni.
Antes de terminar esta crónica me gustaría hacer un inciso respecto a los comentaristas de La Sexta. Es algo que nunca llegaré a comprender respecto a los penaltis que supuestamente no se pitaron. El primero, se vió a todas luces que el defensa levantó ambas manos y desvió la trayectoria del balón. Penalti justo, pro que el árbitro no vió o mejor, no quiso ver.
Respecto al segundo, supuestamente en área del Sevilla F.C. es imcomprensible que comentarista como Kiko Narváez, se empeñe en ver el penalti por cortar la trayectoria del balón cuando todo es más sencillo de lo que parece. Instintivamente, cuando alguien cae al suelo, su movimiento reflejo es estirar la mano para apoyarse y evitar una caída de bruces. Es así de fácil. A veces me exasperan este tipo de comentarios. Ver todos los movimientos a través del reglamento y olvidar los meramente naturales.

Un saludo.