Nuestros temores, nuestros indeseados temores, se han consumado. De nada sirven ahora las quejas, ni los lamentos.
¿Qué se puede objetar ahora contra esta lastimosa derrota? No lastimosa porque se haya producido frente al R. Betis, sino porque ya van varias y contra equipos más débiles sobre el papel. Partidos que se debieron ganar y se escaparon por falta de ideas y no saber cómo abrir las varias defensas que se nos han enfrentado.
No sé si ahora habrán sonado por fin las alarmas, y no porque se haya perdido frente al R. Betis, sino porque ya es la enésima vez que fallan. Jugadores o entrenador es lo de menos.
Doble amonestación a Duscher y expulsión. Supieron aprovecharla los jugadores del equipo contrario. No así las dos claras ventajas numéricas que disfrutó el Sevilla FC en partidos anteriores.
En ajedrez, para poder saber dar un mate, es necesario conocer la “imagen” de mate. Es decir, se deben conocer la posición de las piezas en el mate. Hay infinidades de mates y un buen profesional de este deporte tiene y debe saber cada una de esas imágenes.
En fútbol ocurre igual. Para poder batir la portería contraria hay que saber posicionar a los jugadores. El entrenador debe y tiene que saber cómo son las “imágenes” de gol. Pero claro, un entrenador que fue defensa raramente sabrá qué es eso.
En partidos anteriores, frente al Valencia y frente al Bilbao, -ambos encuentros en copa- el primer gol visitante fue exactamente igual. Saque de esquina, remate desde el primer palo y entró por el segundo. Ni un solo defensa cubría ese palo.
Es necesario que el Sevilla FC cambie de entrenador YA.
No por defender más al entrenador se es más sevillista. Ni por criticarlo con tanto ahínco, menos. Son simples formas y distintas de entender el sentimiento hacia el equipo.
No es la derrota o las derrotas las que duelen, sino las formas en que se producen. Y hoy por hoy, el equipo que dirige Manolo Jiménez no es competitivo.
¿Qué se puede objetar ahora contra esta lastimosa derrota? No lastimosa porque se haya producido frente al R. Betis, sino porque ya van varias y contra equipos más débiles sobre el papel. Partidos que se debieron ganar y se escaparon por falta de ideas y no saber cómo abrir las varias defensas que se nos han enfrentado.
No sé si ahora habrán sonado por fin las alarmas, y no porque se haya perdido frente al R. Betis, sino porque ya es la enésima vez que fallan. Jugadores o entrenador es lo de menos.
Doble amonestación a Duscher y expulsión. Supieron aprovecharla los jugadores del equipo contrario. No así las dos claras ventajas numéricas que disfrutó el Sevilla FC en partidos anteriores.
En ajedrez, para poder saber dar un mate, es necesario conocer la “imagen” de mate. Es decir, se deben conocer la posición de las piezas en el mate. Hay infinidades de mates y un buen profesional de este deporte tiene y debe saber cada una de esas imágenes.
En fútbol ocurre igual. Para poder batir la portería contraria hay que saber posicionar a los jugadores. El entrenador debe y tiene que saber cómo son las “imágenes” de gol. Pero claro, un entrenador que fue defensa raramente sabrá qué es eso.
En partidos anteriores, frente al Valencia y frente al Bilbao, -ambos encuentros en copa- el primer gol visitante fue exactamente igual. Saque de esquina, remate desde el primer palo y entró por el segundo. Ni un solo defensa cubría ese palo.
Es necesario que el Sevilla FC cambie de entrenador YA.
No por defender más al entrenador se es más sevillista. Ni por criticarlo con tanto ahínco, menos. Son simples formas y distintas de entender el sentimiento hacia el equipo.
No es la derrota o las derrotas las que duelen, sino las formas en que se producen. Y hoy por hoy, el equipo que dirige Manolo Jiménez no es competitivo.
No me vale llegar a las semifinales de la Copa. Atl. Bilbao y R. Mallorca también han llegado.
Me vale sumar puntos en la Liga.
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